ESPEJO DEL CIELO, REFLEJO DEL ALMA

Las Terrenas se erige como un tesoro caribeño que deleita a los visitantes con sus playas de ensueño y los entornos impresionantes que las rodean. Aquí te sumergirás en un rincón del mundo donde la naturaleza y la cultura local se funden en una experiencia de destino único.

Esta parte de la isla se conoce por las interminables playas de arena blanca coloreadas de finas palmeras que acarician el cielo azul.

Playa Bonita: Un Refugio de Paz. Es un paraíso tranquilo que justifica su nombre con su arena fina y aguas cristalinas. Es un lugar donde la serenidad se encuentra con la exuberancia tropical. Los cocoteros se alinean a lo largo de la costa, proporcionando sombra natural mientras absorbes los sonidos suaves del oleaje.

Playa Cosón: Elegancia Natural en Cada Ola. Es un tramo de costa que seduce con su elegancia natural y su extensa franja de arena blanca. Esta playa es menos concurrida, lo que la convierte en un refugio perfecto para aquellos que buscan un escape tranquilo.

Ser el segundo país más grande del Caribe, y el más diverso en topografía, significa un sinfín de oportunidades de senderismo y aventuras inolvidables no sólo de playa: La cascada El Limónes una joya escondida rodeada de selva exuberante con 40 metros de caída de agua fresca. El Parque Nacional Los Haitises es un tesoro ecológico con manglares, cuevas y formaciones rocosas que te transportarán a un mundo mágico.

Una nueva forma de vivir
frente al océano

Las Terrenas, es la mezcla perfecta de un pueblo de playa de ensueño y una ciudad cosmopolita. Su costa cuenta con múltiples playas impresionantes, así como una variedad de pequeños hoteles, boutiques de ropa y artesanías, y restaurantes locales.

En Samaná lo tienes todo. Arrecifes de coral, cuevas submarinas, restos de galeones, naufragios y un mundo multicolor de vida marina, son solo algunas de las características que estas aguas tienen para ofrecerte.